Los alimentos ecológicos se han hecho cada vez más populares en las últimas dos décadas. Los consumidores estadounidenses gastaron 56.000 millones de dólares en productos ecológicos en 2020.
Esta cifra aumentó casi un 13% con respecto a 2019, por lo que su popularidad no está disminuyendo.
Algunos piensan que los alimentos ecológicos son más seguros, más sanos y más sabrosos que los cultivados convencionalmente.
Otros dicen que es mejor para el medio ambiente y el bienestar de los animales.
Este artículo compara los alimentos ecológicos y no ecológicos, incluyendo su contenido en nutrientes y sus efectos sobre la salud humana.
Contenido
¿Qué es la comida ecológica?
El término “ecológico” se refiere a cómo se producen ciertos alimentos. Los alimentos ecológicos han sido cultivados o criados sin el uso de:
- productos químicos artificiales
- hormonas
- antibióticos
- organismos modificados genéticamente (OMG)
Un producto alimentario debe estar libre de aditivos artificiales para ser etiquetado como ecológico. Esto incluye edulcorantes artificiales, conservantes, colorantes, aromatizantes y glutamato monosódico (GMS).
Los cultivos ecológicos utilizan abonos naturales, como el estiércol, para mejorar el crecimiento de las plantas. Los animales criados ecológicamente no reciben antibióticos ni hormonas.
La agricultura ecológica tiende a mejorar la calidad del suelo y la conservación de las aguas subterráneas. También reduce la contaminación y puede ser mejor para el medio ambiente.
Los alimentos ecológicos más comprados son las frutas, las verduras, los cereales, los productos lácteos y la carne. También hay productos ecológicos procesados, como refrescos, galletas y sustitutos de la carne.
Resumen: Los alimentos ecológicos se producen mediante prácticas agrícolas que sólo utilizan sustancias naturales. Esto significa evitar todos los productos químicos artificiales, las hormonas, los antibióticos y los OMG.
Los alimentos ecológicos pueden contener más nutrientes
Los estudios que comparan el contenido en nutrientes de los alimentos ecológicos y no ecológicos han tenido resultados dispares.
Lo más probable es que esto se deba a las variaciones naturales en la manipulación y producción de los alimentos. Sin embargo, las pruebas sugieren que los alimentos cultivados orgánicamente pueden ser más nutritivos.
Los cultivos ecológicos tienen más antioxidantes y vitaminas
Varios estudios antiguos han descubierto que los alimentos ecológicos suelen contener mayores niveles de antioxidantes y ciertos micronutrientes, como la vitamina C, el zinc y el hierro.
Los niveles de antioxidantes pueden ser hasta un 69% más altos en estos alimentos.
Un estudio de 2003 descubrió que las bayas y el maíz cultivados orgánicamente contenían un 58% más de antioxidantes y hasta un 52% más de vitamina C.
Además, un estudio informó de que la sustitución de la fruta, las verduras y los cereales habituales por versiones ecológicas podría aportar antioxidantes adicionales a tu dieta. Esto era comparable a comer 1 ó 2 raciones más de fruta y verdura al día.
Las plantas ecológicas no dependen de las pulverizaciones de pesticidas químicos para protegerse. En su lugar, producen más compuestos protectores propios, concretamente antioxidantes.
Esto puede explicar en parte los mayores niveles de antioxidantes de estas plantas.
Los niveles de nitrato son generalmente más bajos
También se ha demostrado que los cultivos ecológicos tienen niveles más bajos de nitrato. Los estudios han demostrado que los niveles de nitrato son un 30% más bajos en estos cultivos.
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Los niveles elevados de nitrato se asocian a un mayor riesgo de ciertos tipos de cáncer.
También se asocian a la metahemoglobinemia, una enfermedad infantil que afecta a la capacidad del cuerpo para transportar oxígeno.
Los lácteos y la carne ecológicos pueden tener un perfil de ácidos grasos más favorable
La leche y los productos lácteos ecológicos pueden contener más ácidos grasos omega-3 y cantidades ligeramente superiores de hierro, vitamina E y algunos carotenoides.
Sin embargo, la leche ecológica puede contener menos selenio y yodo que la no ecológica. Se trata de dos minerales esenciales para la salud.
Una revisión de 67 estudios descubrió que la carne ecológica contenía más ácidos grasos omega-3 y niveles ligeramente inferiores de grasas saturadas que la carne convencional.
Una mayor ingesta de ácidos grasos omega-3 se ha asociado a muchos beneficios para la salud, como la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas.
Sin embargo, otros estudios no encontraron diferencias.
Mientras que varios estudios encuentran que los alimentos orgánicos pueden tener resultados positivos significativos, otros han encontrado pruebas insuficientes para recomendar lo orgánico sobre lo convencional.
Un estudio de observación que comparaba la ingesta de nutrientes de casi 4.000 adultos que consumían verduras ecológicas o convencionales encontró resultados contradictorios.
Aunque se observó una ingesta ligeramente superior de ciertos nutrientes en el grupo ecológico, esto se debió probablemente a un mayor consumo general de verduras.
Una revisión de 35 estudios encontró algunos resultados positivos asociados a los alimentos ecológicos, pero no pudo sacar ninguna conclusión definitiva.
Otra revisión de 233 estudios encontró una falta de pruebas sólidas para concluir que los alimentos ecológicos son más nutritivos que los normales.
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Sin embargo, es esencial recordar que estos estudios varían mucho en sus resultados.
Esto se debe a que el contenido de nutrientes de los alimentos depende de muchos factores, como la calidad del suelo, las condiciones meteorológicas y el momento de la cosecha.
La composición de los productos lácteos y de la carne puede verse afectada por las diferencias en la genética y la raza de los animales, lo que comen, la época del año y el tipo de explotación.
Las variaciones naturales en la producción y manipulación de los alimentos dificultan las comparaciones. Por eso los resultados de estos estudios no son concluyentes.
Resumen: Los cultivos ecológicos pueden tener menos nitratos y más cantidad de ciertas vitaminas, minerales y antioxidantes. Los productos lácteos y la carne ecológicos pueden tener más ácidos grasos omega-3. Sin embargo, las pruebas son contradictorias.
Menos productos químicos y bacterias resistentes
Muchas personas optan por comprar alimentos ecológicos para evitar los productos químicos artificiales.
Las pruebas sugieren que el consumo de estos alimentos puede reducir los residuos de pesticidas y la exposición a las bacterias resistentes a los antibióticos.
Un estudio descubrió que los niveles de cadmio, un metal extremadamente tóxico, eran un 48% más bajos en los productos ecológicos. Además, era cuatro veces más probable encontrar residuos de pesticidas en los cultivos no ecológicos.
En particular, los niveles más elevados de cadmio y residuos de plaguicidas en los productos cultivados de forma convencional seguían estando muy por debajo de los límites de seguridad.
Sin embargo, a algunos expertos les preocupa que el cadmio pueda acumularse con el tiempo en el organismo, pudiendo causar daños. Lavar, fregar, pelar y cocinar los alimentos puede reducir estas sustancias químicas, aunque no siempre las elimina por completo.
No obstante, las pruebas indican que el riesgo de exposición a los residuos de plaguicidas en los alimentos es pequeño y no es probable que cause daños.
Resumen: Elegir alimentos ecológicos puede reducir la exposición a toxinas, residuos de pesticidas y bacterias resistentes a los antibióticos. Sin embargo, las toxinas de los productos normales suelen estar muy por debajo de los límites de seguridad.
¿Tienen los alimentos ecológicos beneficios para la salud?
Hay algunas pruebas que sugieren que los alimentos ecológicos tienen beneficios para la salud.
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Por ejemplo, varios estudios de laboratorio descubrieron que su mayor contenido en antioxidantes ayudaba a proteger las células de los daños. Y los estudios en animales muestran que las dietas ecológicas pueden beneficiar el crecimiento, la reproducción y el sistema inmunitario.
Un estudio también informó de que los pollos alimentados con una dieta ecológica mostraron un menor aumento de peso y un sistema inmunitario más robusto.
Los estudios observacionales más antiguos sugieren que los alimentos ecológicos pueden reducir el riesgo de alergias y eczemas en niños y bebés.
Un gran estudio observacional de 2014 con 623.080 mujeres no encontró ninguna diferencia en el riesgo de cáncer entre las personas que nunca comían alimentos ecológicos y las que lo hacían regularmente.
Desgraciadamente, no hay suficientes pruebas sustanciales para confirmar que los alimentos ecológicos benefician más a la salud humana que los alimentos convencionales.
Se necesitan más estudios de alta calidad en humanos.
Resumen: No hay pruebas suficientemente sólidas para demostrar que comer productos ecológicos proporciona beneficios para la salud en comparación con los alimentos normales.
No todos los alimentos ecológicos son nutritivos
El hecho de que un producto lleve la etiqueta de “ecológico” no significa que sea rico en nutrientes.
Algunos de estos productos siguen siendo alimentos altamente procesados con alto contenido en calorías, azúcares añadidos, sal y grasas añadidas.
Por ejemplo, artículos como galletas, patatas fritas, refrescos y helados ecológicos deben consumirse con moderación. A pesar de ser ecológicos, estos productos pueden seguir siendo bajos en nutrientes.
A la hora de elegir qué comer, puede ser más beneficioso elegir en función de tus necesidades dietéticas y de las vitaminas y minerales que contienen los alimentos, en lugar de basarse en lo ecológico frente a lo convencional.
Resumen: Los alimentos ecológicos altamente procesados pueden seguir siendo bajos en nutrientes y altos en grasas, azúcares y calorías añadidas.
Cómo saber si estás comprando productos ecológicos
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha establecido un programa de certificación ecológica. Cualquier agricultor o productor que venda alimentos ecológicos debe cumplir estrictas normas gubernamentales.
Si eliges lo orgánico, es esencial que busques el sello orgánico de la USDA.
Además, fíjate en estas afirmaciones en las etiquetas de los alimentos, para poder identificar los alimentos que son realmente ecológicos:
- 100% orgánico. Este producto está hecho completamente con ingredientes orgánicos.
- Orgánico. Al menos el 95% de los ingredientes de este producto son orgánicos.
- Fabricado con ingredientes ecológicos. Al menos el 70% de los ingredientes son ecológicos.
Si un producto contiene menos del 70% de ingredientes ecológicos, no puede llevar la etiqueta de ecológico ni utilizar el sello del USDA. En Europa, Canadá y Australia se aplican normas similares. Cada país o continente tiene su propio sello para ayudar a los consumidores a identificar los alimentos ecológicos.
Resumen: Para identificar los alimentos ecológicos, busca el sello correspondiente o una declaración como uno de los tres ejemplos anteriores.
Resumen
Las pruebas son contradictorias sobre si los alimentos ecológicos contienen más antioxidantes y nutrientes que los alimentos cultivados convencionalmente.
Consumir alimentos ecológicos puede reducir tu exposición a productos químicos artificiales, hormonas añadidas y bacterias resistentes a los antibióticos.
Sin embargo, puede costar más y puede no estar al alcance de todos. Además, no está claro si ser ecológico tiene beneficios adicionales para la salud.
Comprar o no productos ecológicos es una elección que debes hacer en función de tus preferencias personales.
